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lunes, 18 de septiembre de 2023

Pasaban por caja

    Clark Gable: 4.500 dólares a la semana más una bonificación de 50.000 a la firma del contrato, de la que Selznick tenía que pagar la tercera parte. Esta compensación iba destinada a sufragar el divorcio del actor de Rhea Langham.

    Vivien Leigh: Su contrato especificaba 25.000 dólares por trabajar en GWTW. Robyns y Turner indican 15.000 dólares.

    George Cukor: Mientras estuvo bajo contrato con la Selznick International, su sueldo era de 4.000 dólares semanales.

    Ben Hecht: El "doctor de guiones" impuso como condición recibir 15.000 dólares por una semana de trabajo.

    Hobe Erwin: Su contrato le garantizaba 5.000 dólares por 10 semanas de trabajo.

    Walter Plunkett: Desde que comenzó la producción de la película, 750 dólares a la semana.

F. Scott Fitzgerald: desde el 6 de enero de 1939 y aproximadamente hasta el 24 de enero, su salario era de 1250 dólares a la semana.

    Maxwell Arnow, como director de reparto contratado desde el 27 de agosto de 1937, cobraba 400 dólares a la semana, con un extra de 5.000 dólares si "encontraba" a Escarlata, o 2.500 dólares por el Ashley o la Melania definitivos.

lunes, 7 de febrero de 2022

Una mirada de 80 años

En esta entrada de youtube se nos ofrece un vistazo a la historia de la película Lo que el viento se llevó, desde su venta como novela a los estudios del productor David O. Selznick en 1936 hasta la exposición que preparó el Ransom Center hace un par de años.

lunes, 29 de noviembre de 2021

La cámara tras la cámara

Una breve mirada... pero significativa. Porque estas imágenes nos llevan al rodaje de Lo que el viento se llevó, un par de secuencias inolvidables en las que intervenían los protagonistas del film que firmó Victor Fleming y que se preparaban para desempeñar sus papeles.

domingo, 17 de octubre de 2021

Agotado por el trabajo

El 17 de octubre de 1939 David O. Selznick le escribió a Ray Klune, el encargado de la producción de Lo que el viento se llevó: "He estado pensando en lo difícil que debe haber sido vivir conmigo estos días, y el montón de insultos que he enviado, ya fuera verbalmente o bien por el memo, a ti, a Lyle Wheeler y a buena parte de los otros chicos en el set. Me gustaría que les explicaras a ellos sobre lo incómodo que me siento al darme cuenta de lo terrible que he sido; que eso no significa que no aprecie todos sus esfuerzos, y que la única excusa que puedo ofrecer es que estoy totalmente agotado y mis nervios, supongo, están completamente exhaustos."

lunes, 5 de abril de 2021

Pruebas de cámara

Antes de rodar la película tal y como la recuerda el público, el equipo de producción empezó las pruebas de maquillaje y vestuario semanas antes de filmar la primera escena.

Había que comprobar (¡como si hiciera falta...!) que los protagonistas, Leigh y Gable, daban bien en pantalla, juntos o separados.


Tampoco se dejó pasar de largo a Leslie Howard y Olivia de Havilland, por citar solamente a los protagonistas. Todos los actores tuvieron que presentar su relación con la cámara... que, según sabemos, no pudo ser más satisfactoria.

lunes, 8 de marzo de 2021

Scarlett estuvo aquí

 Las imágenes de este video nos llevan a Lo que el viento se llevó antes y después de ser filmada la película.

Se trata de un paseo por lo que fueron los estudios Selznick y que inspiraron Gone with the Wind y otros rodajes a mediados de los años 30 y entrados los 40... y que aún hoy se utilizan para tareas cinematográficas, (aunque ya no circulen por aquí ni Vivien Leigh, ni Clark Gable, ni Thomas Mitchell...), industriales y de oficinas.


jueves, 27 de agosto de 2020

Jock Whitney, productor


John Hay Whitney, conocido como Jock, (27 de agosto de 1904-8 de febrero de 1982), respaldó financieramente a Selznick en la fundación de la Selznick International, junto con su hermana y su primo Cornelius Vanderbilt, con el que invertía también en las investigaciones de Technicolor. El director M.C. Cooper se unió a ellos para crear la compañía Pioneer, dedicada a realizar películas con el nuevo proceso de color. A Jock Whitney le interesaba el teatro y también poner su dinero en películas de calidad. Fue embajador de Estados Unidos en Gran Bretaña entre los años 1956 y 1961.

Era propietario de diversas obras y libros y no dudaba en dar su opinión sobre la marcha de las producciones e ideas para las mismas; fue él quien sugirió el título A Star is Born (Ha nacido una estrella) para la película que protagonizarían Janet Gaynor y Fredric March.

El entusiasmo y apoyo financiero de los Whitney también determinaron la producción de Lo que el viento se llevó. Kay Brown le envió un ejemplar del libro a Jock Whitney, y le pidió ayuda para convencer a Selznick de que comprase cuanto antes los derechos. Según Selznick, “Jock me telegrafió en el sentido de que si me preocupaba el precio, él compraría el libro y lo cedería a la compañía si decidíamos hacerlo... No podía arriesgarme a que él se riera el último... (...) Durante toda la preparación su fe nunca vaciló; no dudó ni por un momento acerca del futuro, o se lamentó por el coste, asegurando a los miembros de la directiva que confiaba en el resultado final y que compartiría la responsabilidad conmigo”.


Whitney también era partidario de que la película fuera lo más fiel posible al libro y que se contara la historia completa.

Con la película ya comenzada, aportó más dinero cuando Selznick se vio en problemas para continuar. La familia Whitney invirtió otros cinco millones de dólares más en ese momento en la compañía, uno de ellos destinado a GWTW.

El día del primer pase sorpresa, Jock Whitney acompañó a los Selznick y no pudo contener las lágrimas, como ninguno de los presentes, ante la reacción del público.

lunes, 15 de junio de 2020

Un día de rodaje

El 15 de junio de 1939 tuvo su apretada hoja de trabajo en Lo que el viento se llevó.

Escarlata participó en las tres secuencias en las que se laboró este día. Comenzó por oír las voces de Gerald, Ashley y Rhett al final de la película, y continuó con el rodaje de la escena en la que es atacada en el puente de Shanty Town

Se había conseguido arreglar el generador de energía eléctrica en el lago de Big Bear, por lo que ya era posible el rodaje previsto de la secuencia en la que Big Sam lucha con el tipo que atacaba a Escarlata en Shanty Town. En la novela se añadía que se trataba de un afroamericano, pero Selznick, preocupado por cómo se mostraba a los negros en la película, revisó la escena para que el atacante fuera un blanco, al que intepretó Yakima Canutt. Everett Brown y Faye Helm figuran como Big Sam y Escarlata en esta secuencia en la que el carro está a punto de caer del puente, pero se evita el accidente. Los primeros planos de los personajes de filmarían más tarde.


En los 40 Acres, ese mismo día, Fleming dirigió a Gable y Leigh en la secuencia en la que Rhett y Scarlett caminan por Tara, tras haber regresado de su luna de miel.

lunes, 17 de febrero de 2020

Clásicas imágenes de una película clásica

Este artículo nos ofrece una selección de fotografías tomadas durante el rodaje de Lo que el viento se llevó.
En esta colección de imágenes podemos ver a los cuatro protagonistas: Leigh, Gable, Howard y de Havilland, con al menos un par de los directores de la película que produjo David O. Selznick y varios miembros del reparto y del departamento artistico.

No es que nos sorprendan las imágenes que los autores de la página califican de "raramente vistas", pues al fin y al cabo hemos recorrido muchos lugares dedicados a Gone with the wind y lo hemos visto casi todo, pero nunca viene mal hacer un recorrido por el rodaje y encontrarnos, por ejemplo, con la señorita Lee, intérprete de Scarlett O'Hara...

jueves, 1 de noviembre de 2018

Productor meticuloso

El productor de revistas de Broadway F. Ziegfeld hacía vestir a sus coristas con enaguas de encajes importados, a sabiendas de que el público jamás vería ni un centímetro de ellas, pero consciente de que

“cuando esas chicas entran en el escenario sabiendo que llevan esas enaguas insuperablemente caras, ese pensamiento hace que se muevan de una forma distinta; cambia la expresión de sus rostros, es algo que contribuye a hacer más hermosas a mis muchachas.”

También del director Erich Von Stroheim se cuenta una historia similar, en este caso con ropa interior con anagramas bordados para los aristócratas y oficiales que poblaban sus películas. Selznick hizo lo mismo con las enaguas de las chicas en GWTW, lo que da prueba de su meticulosidad.

lunes, 28 de mayo de 2018

Fieles al tiempo

En agosto de 1939, en pleno rodaje de Gone With the Wind, confirmaban que se había seguido la norma de no utilizar objetos o vestidos datados en el siglo XX... con una excepción:

W.W. Ferguson, que trabajaba para la Selznick International Pictures, señaló, muy convencido: "The only things modern were the horses, but then a horse’s face hasn’t changed much in the past 75 years".
"Las únicas cosas modernas han sido los caballos, pero un rostro de caballo no ha cambiado demasiado en los últimos 75 años".

martes, 20 de diciembre de 2016

Coste para los estudios cinematográficos


Los editores lo habían fijado en 100.000 dólares, que era una suma enorme tratándose de la primera novela de una escritora desconocida, Lo que el viento se llevó, de Margaret Mitchell, pero Annie Laurie Williams, la encargada de las negociaciones por parte de la editorial Macmillan, pensó que no había mejor manera de llamar la atención de las productoras, aunque las pujas en firme se iniciaran sobre un precio más bajo.

Universal no quiso saber nada. MGM y Paramount tampoco entraron en la carrera, en un principio. Jack Warner, ante la negativa de Bette Davis, desistió de realizar una oferta.

Darryl F. Zanuck, de Twentieth Century Fox, ofreció 35.000 dólares. Williams rebajó el precio a 65.000 dólares, al ver que las pujas no se sucedían como había esperado. La RKO, ante los ruegos de Katharine Hepburn, pujó por 45.000 dólares.

Selznick hizo su oferta final: 50.000 dólares. Williams se puso de acuerdo con Margaret Mitchell para aceptar esa cifra y aunque la RKO ofreció cinco mil dólares más, la escritora mantuvo su palabra de vender los derechos por 50.000 dólares. Mitchell firmó el contrato con la Selznick International el 30 de julio de 1936.

Existe una versión no oficial, como en tantos aspectos de GWTW: según Zanuck, él habría ofrecido 40.000 dólares y Paramount se unió a la subasta con 45.000, lo que obligó a la Fox a llegar a los 55.000; Mayer hizo reunirse entonces a los jefes de los estudios; escribieron sus nombres en trozos de papel que metieron en un sombrero y decidieron que el que saliera elegido compraría la novela. El papel llevaba el nombre de Selznick.

lunes, 15 de agosto de 2016

Un puñado de imágenes

Esta página nos conduce a un paseo por el rodaje de Gone with the Wind bajo el título de "fotos raramente vistas", pero que la mayoría de amantes de Lo que el viento se llevó recordamos, aunque sea vagamente y sin poder ubicarlas en otra página o en un libro.

Pero merece la pena echarles un vistazo y recordar algunos momentos del rodaje en 1939. La mayoría de estas fotos nos muestra a director, actores y equipo técnico con una sonrisa en sus rostros, lo cual no significa que no se hubieran tomado el trabajo en serio o que nunca se enfadaron los unos con los otros, como ya sabemos...

sábado, 26 de marzo de 2016

Joseph B. Platt, decoración de interiores

Hobe Erwin sugirió a Joseph B. Platt como su sustituto en el cargo de responsable de la decoración de interiores de Lo que el viento se llevó en octubre de 1938.

Joseph Brereton Platt, que nació el 26 de marzo de 1895 en New Jersey, era diseñador, dibujante y pintor. Pertenecía al grupo de la revista norteamericana House & Garden, especializada en la decoración y una de las más prestigiosas del país, que no dudó en hacer una buena publicidad de la película como trabajo de uno de los suyos. Este extremo llevó a las protestas de Wheeler y Selznick, que apreciaban el valor de Platt, pero no apoyaban la exageración de su aportación al decorado de Gone with the Wind.

Wheeler afirmaba que la única contribución de Platt al decorado había sido el papel pintado para la pared del vestíbulo de la casa de los Butler, al que habría que sumarle la propuesta de alfombras y mobiliario antiguo para la vivienda en Atlanta.

El talento de Platt, que falleció el 6 de febrero de 1968, se aprovechó también en los trabajos para Selznick Rebecca (Rebeca, 1940) y Portrait of Jennie (Jennie, 1947).

miércoles, 24 de junio de 2015

Cazatalentos ventosos

Entre la primavera de 1936 y enero de 1939 se produjo un inusitado incremento en las filas del gremio de los cazatalentos cinematográficos, aunque la mayoría de los que así se consideraban no eran profesionales y casi todos habían hecho un único descubrimiento: a sí mismos o a un pariente cercano.

La “fiebre escarlata” estaba en pleno apogeo y todos los días alguien consideraba que había encontrado a la Escarlata ideal en su hermana, a Rhett en el ascensorista de su oficina, al único intérprete posible de Ashley en una función de aficionados o a la Melania perfecta tras un mostrador de unos grandes almacenes.

Entre toda esta marea de directores de reparto espurios había unos cuantos que sí eran genuinos y en cuya experiencia confió Selznick para encontrar a los intérpretes principales de Lo que el viento se llevó.

Ya sabemos que, con un puñado de excepciones, de las sucesivas búsquedas no salió nada concreto, y no fue por falta de incentivos para los cazatalentos: el contrato de Max Arnow, que se unió a las “fuerzas expedicionarias” de Selznick en agosto de 1938, especificaba que, además de su sueldo semanal, cobraría un bonus de 5.000 dólares si descubría a la joven que al final sería contratada para Escarlata, 2.500 dólares adicionales si recomendaba a quien se adjudicara el papel de Ashley y otros 2.500 dólares si encontraba a la Melania correcta. Los esfuerzos de Arnow fueron en vano y su cuenta corriente no se vio incrementada por estos conceptos.

lunes, 17 de septiembre de 2012

Un vistazo al viento

No falta en un blog que se base en el cine clásico el comentario sobre Lo que el viento se llevó. Aquí tenemos uno, que resume en unas líneas los detalles más característicos que dieron pie a la película que firma Victor Fleming.

viernes, 8 de junio de 2012

La vida de David O. Selznick

La industria prepara la narración de la vida de David O. Selznick que, naturalmente, habrá de tocar Lo que el viento se llevó, pero se basará en una vida cargada de actividades.
Quizá el único problema que le vemos al proyecto es la muy posible interpretación del personaje por parte de Ben Stiller, pero confiaremos en su estudio sobre David.

lunes, 19 de diciembre de 2011

Cinco minutos

Un pequeño vistazo al rodaje:

martes, 2 de febrero de 2010

Cabellos y caballos

Además de comportar una nueva manera de planificar los ángulos y movimientos de las cámaras y la cantidad y colocación de las luces, el Technicolor también planteó problemas en los departamentos de decorados, maquillaje, peluquería y vestuario en aquellos primeros años, cuando la única forma de saber cómo iba a quedar un plano en pantalla era experimentar, dejarse guiar por los escasos "expertos", cambiar lo que se considerara necesario y volver a rodar la toma, a veces repetidas veces.

Lo que el viento se llevó no fue ajena a ese método, pues el nuevo sistema estaba todavía en mantillas. Tanto el equipo técnico con el artístico hicieron acopio de paciencia para enfrentarse al reto de la mejor manera: los hermanos Tarleton lucieron diversos tonos de rojo hasta que se encontró el adecuado; Ashley Wilkes se bajó un día del sillón de peluquería convertido en un rechamante pelirrojo y no el rubio amor de Escarlata.

Evelyn Keyes, rubia de toda la vida, se dejó teñir de castaña para interpretar a Suellen, pero no bien empezaba a acostumbrarse a su nueva imagen cuando la Paramount la reclamó para filmar nuevos planos de la película que había acabado de rodar. Evelyn volvió temporalmente al rubio, como la prefería De Mille, gracias a una peluca; cumplió con los "retakes" y compromisos fotográficos y después terminó su trabajo como Suellen... o eso pensaba: a finales de abril Selznick la llamó urgentemente para nuevas tomas cuando Keyes estaba en Omaha para el estreno de Union Pacific; la joven actriz volvió rauda a Los Angeles y se sometió otra vez al teñido con el color propio de la mediana de las O’Hara... justo cuando el rodaje de GWTW sufrió el parón por la baja de Fleming.

No sólo los actores humanos tenían que estar pendientes del Technicolor: entre los decretos de la compañía figuraba la prohibición de poner nada blanco ante la cámara, porque la mayoría de las veces, si no se tenía cuidado, el objeto blanco se hacía invisible en la pantalla. Así pasaba con el caballo blanco de Gerald, que tuvo que ser "oscurecido" con sucesivas pulverizaciones de carbonilla.

viernes, 20 de noviembre de 2009

Choque de voluntades

Por mucho que amaran el cine, los productores y responsables de los estudios no eran hermanitas de la caridad y su objetivo era tanto hacer negocio como conseguir una buena película. David Selznick podía pasarse días en la sala de montaje combinando planos y más planos hasta quedar momentáneamente satisfecho de los valores artísticos de una de sus obras, pero también sabía esgrimir el látigo con contundencia… y mostrarse luego encantador hasta el punto de hacerse perdonar todo.


Durante el rodaje de Lo que el viento se llevó Vivien Leigh tuvo buena prueba de que los Selznick podían ser muy despiadados: cuando se enteró del despido de Cukor y, después de rogar en vano a David que readmitiera al director, Vivien sintió que su participación en la película había perdido todo su encanto y su razón de ser, y también que no sería capaz de llevar a buen puerto su interpretación de Escarlata sin Cukor como guía.

Acudió a Myron Selznick para anunciarle que quería romper su contrato, pero el agente le puso muy claras las cosas:

“Si dejas esta película, estarás en los juzgados hasta el último día de tu vida. No volverás a trabajar nunca, ni en el cine ni en el teatro. Nunca serás libre. David se ocupará de eso. Y yo también, señorita Leigh”.

La amenaza era real, por supuesto. Aunque hubiera habido Escarlatas de repuesto (¿habrían aceptado la nueva oportunidad Paulette Goddard, Bette Davis, Joan Bennett…?), Selznick habría sido el hazmerreír de la industria, los medios y el público si su actriz soñada le dejaba plantado, por no hablar del cataclismo económico para la productora, empeñada hasta las cejas y con la perspectiva de abandonar GWTW (dando por perdido lo invertido hasta entonces) o empezar de nuevo el rodaje con el gasto que ello supondría.

Los hermanos Myron y David Selznick

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